LA SCUOLA
DEI GELOSI DE ANTONIO SALIERI –LIBRETTO DE CATTERINO MAZZOLA
DIRECCION
MUSICAL ESTEBAN LOUISE
DIRECCION
ECENICA NICOLAS ZECCHI
ESCENOGRAFIA
CECILIA PARRA
ORQUESTA DE
OPERA JOVEN
OPERA JOVEN-
SALA NELLY GOITIÑO
Sodre
Para muchos
melómanos el nombre de SALIERI es prácticamente desconocido, salvo por el film o la obra de teatro AMADEUS que lo muestran
desde un punto de vista bastante desfavorable.
La verdad es
que Salieri fue un gran músico con una influencia importante en los músicos de
la época, siendo maestro de varios de ellos como Beethoven, Schubert Liszt. Fue
durante largos años director del Conservatorio de Viena, músico oficial de la Corte , amén de un prolífico compositor
de obras líricas y no líricas ( compuso 39 operas, varias de las cuales fueron
encargadas para inaugurar Teatros italianos, comenzando por LA SCALA DE MILAN
que fue inaugurada con su Opera L EUROPA RICONOSCIUTA, que además fue la Opera con
que se reinauguró en 2004 despues de su reconstrucción.
LA SCUOLA
DEI GELOSI es una Opera de la etapa media de la producción del autor y en su
momento disfrutó de bastante popularidad en el medio lírico, para más modernamente
caer en el olvido.
Una interesante
iniciativa de OPERA JOVEN la de revisitar este texto, que tiene indudablemente
sus valores, en carácter de estreno para el continente americano.
Salieri es
un músico delicado, elegante, creativo y estas características se hacen presentes
en toda su partitura, particularmente en la parte orquestal que es un constante
placer oír.
Las
limitaciones de la Opera vienen por el lado del texto que es francamente
bastante poco interesante, una commedia buffa como tantas otras sin un
particular sentido que la destaque, y por el lado del estilo musical que es
bastante monocorde, lo cual sumado a las 2,30 de ejecución puede provocar una
cierta sensación de tedio.
OPERA JOVEN
es un conjunto operístico fundado entre otros por el triunfante tenor uruguayo
EDGARDO ROCHA, que busca ofrecer oportunidades
de frecuentación del palco escénico a cantantes jóvenes que están en pleno
proceso de desarrollo de sus voces y para los cuales se buscan textos líricos que
se adecuen a esta etapa de su carrera.
En verdad fue un privilegio poder ver a ese grupo de talentosos cantantes muy jóvenes
que nos traen el optimismo de que no todo está perdido para la lírica uruguaya
y que en el futuro tendremos valores que
la revivirán.
La opera
requiere 2 bajos barítonos un tenor lírico , un tenor de gracia, 2 sopranos (
una de ellas coloratura ) y una mezzo. Y todos ellos estuvieron impecables.
Se destacaron
las voces de RODRIGO CABEDA con una importante y extensa voz de bajo-barítono y
sobre todo de MARIA JOSE BADANO , que tuvo a su cargo las arias más exigentes
de la obra, impecablemente resueltas,seguidos de cerca por los muy buenos
EMILIANO VIDAL , NATALIA VEGA ( sería una Susanna ideal ) Y MANUELA ROVIRA.
ALFREDO
BELLONI reiteró la belleza de su órgano vocal, que lo hace portador de una de
las voces más bonitas del medio, pero que aún no consigue dominar por completo.
El día que lo consiga dará que hablar. ADRIAN PUIG luego de un comienzo algo
azaroso en la primer aria se fue afirmando y exhibió sobre todo bonitas notas
agudas y panísimos. Es todavía un cantante en formación pero tiene un registro
que no abunda por lo que debería tener una buena carrera.
La dirección
orquestal de LOUISE fue a la altura de sus brillantes antecedentes y la
orquesta tuvo un desempeño ejemplar, contribuyendo en mucho a la calidad de la
representación
Hubo que
sacrificar buena parte del escenario para dar cabida a la Orquesta ya que el
Teatro no tiene foso ( una anomalía que no se haya pensado en esto cuando se
hizo la reforma ), con el resultado de que los cantantes cantaron de espaldas
al director que estaba situado en la parte posterior del escenario, siguiendo
sus marcaciones por dos monitores colocados en la boca de la escena. Un esquema que favorece a las voces de los cantantes al colocarlos en mayor proximidad con el público que la orquesta y que habría que estudiar la forma de repetir compatibilizándolo con la existencia de una escenografía propiamente dicha.
Esto obligó
a que los elementos escenográficos fueran mínimos, apenas para sugerir los ambientes.
Muy efectiva
la dirección escénica de Zecchi, que obtuvo buena respuesta actoral de los
solistas con la excepción de los dos
tenores que lucieron limitadas condiciones en este rubro..
Un
espectáculo valioso al que vale la pena acercarse, y que se ofrece al público
montevideano a un precio de la entrada que es más bien simbólico : 300 pesos la
platea.
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