DON CARLO- ELENCO NACIONAL
Cabe ante todo felicitar al Teatro Colón por haber retomado la antígua política
de realizar un par de funciones
extraordinarias de la Opera, dándole la oportunidad a los cantantes que han oficiado
de covers del elenco principal, probarse en escena y hacer conocer al público
su trabajo.
Es obvio que para que esta política de resultados,
es necesario que se practiquen en estas funciones precios populares ya que de
lo contrario el público tenderá a ver los espectáculos de abono, partiendo de
la base de que el elenco importado por incluir cantantes de prestigio en el
exterior, tendrá un nivel de calidad superior al local, cosa que últimamente no
se ha venido dando .
Infelizmente el Teatro trabajó en contra de si
mismo porque si bien estableció precios populares ( la platea costaba 30% del
precio en las funciones de abono, o sea un descuento del 70% ) no divulgó lo
que estaba haciendo y la gente que últimamente huyó del Teatro por no poder
pagar los precios astronómicos que se estaban cobrando, no se enteró de la novedad
y no regresó, dando por resultado una sala sólo parcialmente llena.
Y es una pena porque la función fue muy respetable.
No creo que haya muchos Teatros en el mundo que pueden darse el lujo de presentar
una versión digna de esta difícil ópera con sólo los cantantes locales.
En primer lugar, claro, estuvo la misma producción
escénica que ya he comentado al hablar del primer elenco. Una puesta en escena
con gran despliegue visual que más allá de algún detalle objetable, nos
trasporta de vuelta a los espectáculos de cuando el Colón era el Colón y se
veían producciones magníficas, que además respetaban rigurosamente el espíritu
de la obra presentada.
El regisseur EUGENIO ZANETTI volvió a recibir la
mayor de las ovaciones a la hora de los saludos finales, por un público que ya
había comenzado a resignarse a sólo ver versiones atrozmente modificadas de las
Operas que se presentaban.
ZANETTI es
más un esteta que un director teatral y ello fue notorio por ejemplo en la
belleza de todas las escenas de conjunto y la disposición de todos los
elementos en el cierre de cada acto, que parecieron destinados a ser
inmortalizados en un cuadro.
No es quizás un gran director de intérpretes y me
parece que cada uno quedó sujeto al uso de su propio talento a la hora de crear
los personajes, de allí que haya habido bastante disparidad entre ellos.
Es de lamentar que anoche un error perjudicó
precisamente a la mejor lograda de las escenas : la quema de los flamencos
condenados por herejes, un gran logro de la puesta, por su logrado realismo,
que ayer no se vio porque por un error el fuego comenzó demasiado tarde cuando
ya el telón estaba bajando.
En el elenco hubo dos triunfadores netos de la
noche GUSTAVO LOPEZ MANZITTI y EMILIANO
BULACIOS. Ambos debieron estar en el primer elenco porque fueron notoriamente
superiores a sus pares importados.
Manzitti nos dio un bellísimo retrato musical y actoral del
torturado protagonista de la obra, un papel agotador, complejo, que canta en
casi todas las escenas y no tiene una sola aria para lucirse. ( la única aria
está en el primer acto, cortado en esta versión )- Gustavo , con su voz de
timbre ahora mucho más agradable al oído que en los primeros tiempos de su
valiosa carrera, dotada de un cierto color baritonal, que logra remontarse al
agudo sin que haya contraste de coloración, nos dio un finísimo retrato, de
gran valor emotivo y absolutamente en control de la parte vocal, con una delicada
ejecución de la línea melódica verdiana. Supo además reponerse rápidamente de
una entrada en falso en el primer acto, repitiendo las dos sílabas cantadas
antes de tiempo casi sin que nadie percibiera el lapsus.
Bulacios impactó con su desbordante vocalismo que
se agigantó si se lo compara con la pobre prestación del intérprete titular,
con una voz que sonó a destruída por el tiempo pese a la juventud relativa del
cantante.
CARLOS ESQUIVEL en el papel menor pero difícil del
Fraile dio una excelente versión, alejada de las dificultades que el papel
ofreció a Debevec por ser demasiado agudo para su voz.
El peor compromiso de la noche lo tuvieron LUCAS
DEBEVEC MEYER y ALEJANDRO MEERAPFEL que
sustituían a los que por lejos habían sido los mejores integrantes del elenco
titular.
Meerapfel estuvo correcto, con algunas notorias
dificultades en el ascenso hacia los agudos, que en más de una vez parecieron
fuera de afinación y un timbre que en ciertas zonas de la voz no es de los más
agradables. Actuó correctamente un papel que en esta versión no logra decir a
que vino.
Debevec se entregó con alma y vida al personaje en
una intensa interpretación que yo hubiera
preferido más sobria, menos extrovertida. En algunas escenas su Felipe II
estuvo muy cerca de caer en el melodrama. En lo vocal lució un buen caudal y
solidas notas graves, asi como también un sonido que parece demasiado gutural y
ciertas dificultades a la hora de remontarse hacia los agudos.
MARIA LUJAN MIRABELLi había ya cantado la
EBOLI en el elenco titular hace unos 11
años y había obtenido un buen éxito personal pese a que había salido a escena
casi sin ensayos. Cantante del coro estable del cual se ha jubilado, no
recibió un trato justo del Teatro que
después de ello la contrató en contadas ocasiones y no para papeles de la talla
de EBOLI. Es así que ha hecho fuera del Colon sucesivas AMNERIS, AZUCENA, LA
FAVORITA y nunca tuvo la oportunidad de
hacerlas en el Teatro. Esta vez casi ocurre lo mismo porque la idea original
era que no hubiera funciones con elenco local. Y el Teatro además cometió una
clara injusticia cuando VIOLETA URMANA
dejó de ser de la partida ( hay quien dice que nunca estuvo contratada
)-
Si bien ni Mirabelli ni ningún admirador suyo, entre los cuales me cuento, podría quejarse de que ocupara un segundo plano frente a una cantante de los quilates de la Urmana, me parece una total falta de respeto al cantan te nacional que se haya preferido traer a una cantante internacional ya pasada de su mejor momento para hacer algo que la cantante local, a quien el Teatro le debe algunos favores, demuestra ahora que podía hacerlo igual o más bien mejor.
Si bien ni Mirabelli ni ningún admirador suyo, entre los cuales me cuento, podría quejarse de que ocupara un segundo plano frente a una cantante de los quilates de la Urmana, me parece una total falta de respeto al cantan te nacional que se haya preferido traer a una cantante internacional ya pasada de su mejor momento para hacer algo que la cantante local, a quien el Teatro le debe algunos favores, demuestra ahora que podía hacerlo igual o más bien mejor.
Mirabelli hizo una Eboli volcánica y bien cantada
en general con un punto alto en el OH DON FATALE donde exhibió un registro agudo firme y de
importante volumen, más allá de alguna ocasional estridencia que, justo es
decirlo, aparece con frecuencia en las interpretaciones de las mezzos-mezzos
que cantan este papel muy exigente con
el registro agudo al punto que en más de una oportunidad lo cantan las sopranos.
Fue además impecable la manera en que
resolvió la difícil aria del velo con su coloratura endemoniada , cantada en
mezza voce. Fue perjudicada en la primer estrofa por una mala idea de Zanetti
de colocarla bien atrás en el escenario ( no se hace eso con una cantan te que
canta una de las arias más difíciles de la obra y del repertorio para mezzo !!!) y la fuerte orquestación de Levin que es
impiadosa.
El caso de HAYDEE DABUSTI es diferente . Puede
decirse que recién ahora está debutando en el Colón tras una serie de papeles
de cover sin función y algunos papeles
menores. La cantante ha construido a puro esfuerzo propio una carrera de
prestigio cantando roles particularmente difíciles y pesados como ODABELLA (ATTILA ) ABIGAIL (NABUCCO),
NORMA. La gran duda es cómo sonaría su voz en este escenario enorme. Yo diría
que no tuvo problema alguno con el volumen de la voz, que se la oyó
perfectamente en todo momento y que además superó la barrera de la orquesta, el
coro y los demás cantantes en todos los concertantes. Cantó además siempre
afinada y segura. Y sin embargo uno no podía dejar de sentir que no era una interpretación
a la altura de sus dos experiencias anteriores con el papel, en condiciones
mucho más desfavorables pero en escenarios de reducida dimensión. Sucede que ,
contrariamente a lo que ocurre con los cantantes cuando van avanzando en años
de carrera, la voz de HAYDEE está poniéndose cada vez más lírica ( o está
recuperando su cualidad natural ¿?), más clara y eso deja en quienes estamos
acostumbrados a fuertes sopranos spinto en la parte, la sensación de que nos
está faltando algo, de que nuestros oídos no están siendo del todo satisfechos .
Felizmente todo cambió en la escena final con DABUSTI dejando de lado toda
cautela,y cantando con total fuerza y las debidas apoggiaturas una impecable
versión del TU CHE LE VANITA seguida por un magnífico dúo en la larga versión
completa,que incluye el famoso y exigente fragmento “ heroico” o “bélico “ con el tenor.
Se puede decir que en esas 2 magnificas escenas finales Haydee llegó finalmente
al Colón.
LUISG.BAIETTI
ESTA NOTA SE PUBLICA AQUÍ COMO MERO
ANTICIPO DE SU PUBLICACION POSTERIOR EN OPERA IN THE WORLD CON LAS CORRECCIONES
DE ESTILO Y EL MATERIAL FOTOGRAFICO CORRESPONDIENTE, PUBLICACION QUE EN ESTE
CASO SE VERA DEMORADA YA QUE LA CRITICA DEL DR.ALBERTO LEAL SOBRE EL PRIMER ELENCO, QUE CORRESPONDE QUE SEA
PUBLICADA EN PRIMER LUGAR SE RETRASARA ALGUNOS DIAS DEBIDO A QUE POR RAZONES DE
AGENDA RECIEN PODRA VER LA SEGUNDA FUNCION DEL PRIMER ELENCO QUE OCURRIRA HOY A
LA NOCHE.
ESTA NOTA HA SIDO EDITADA POR EL MOTIVO QUE SE DETALLA A CONTINUACION
ResponderEliminarEn mi comentario sobre el elenco local incursioné en dos párrafos sobre un asunto personal que concierne a dos de los integrantes del elenco. Aparentemente estaba mal informado y lo que dije no se corresponde con la realidad. Por ello he decidido eliminar dichos párrafos , sin quitar o agregar una coma o un punto a mis consideraciones sobre los aspectos puramente artísticos del espectáculo. Es muy triste que lo que dije no sea verdad, pero de nada sirve colorear la realidad para hacerla adecuarse a nuestros mejores deseos. Lamento la confusión, y lamento sobre todo que las cosas no sean como yo erróneamente las describi.
Hola Luis. Estuve en la misma función extraordinaria del martes, pero mi juicio será opuesto al tuyo. La representación me pareció equivocada de cabo a rabo, con un par de decorosas excepciones. El director de orquesta interpretó la partitura a trazo grueso, sin matices y tapando permanentemente a los cantantes. El tenor tiene una voz débil y que en todo momento suena velada, además de que su timbre es sumamente ingrato a mi oído (ya me había pasado con el Werther del Avenida y ahora lo confirmo en una sala más grande). La mezzo no pegó ninguna coloratura en la canción del velo (claramente estaba fuera de sitio) y eso la condenó desde el principio. Felipe II, por voz y presencia, parecía más criado que monarca. La marcación escénica fue de lo peor que ví (no pudo haber sido más anodino el momento en que Don Carlo amenaza con su espada al padre y Posa lo desarma). En el otro extremo, la soprano Haydee Dabusti (a quien sólo conocía de nombre) exhibió una bella voz en punta, bien audible, y el coro me pareció ajustadísimo. No deja de ser divertido apreciar cómo una misma función genera percepciones tan divergentes. Es más, qué aburrido sería estar siempre de acuerdo! Saludos
ResponderEliminarHola Francisco.Gracias por escribirme. Una de las cosas que lamento en mi blog es la falta de contribuciones de los que lo leen.
ResponderEliminarY coincido plenamente contigo en una afirmación : el mundo sería muy aburrido si todos pensasemos de la misma manera..
Pasa que muchas veces no se escribe por pudor, creyéndose uno con poca autoridad para contribuir en el blog de quien asiste a tantos espectáculos y se nota que expone desde un conocimiento real y presencial. Pero la autoridad sólo la dan los años, y mientras tanto se aprende mejor si además de leer, uno se anima a escribir aunque sea unas pocas líneas. Al menos es mi caso, que tengo poca experiencia en ópera pero gozo aprendiendo. Ahora que descubrí tu blog, espero seguir leyéndote y contribuir cuando pueda con alguna anotación. Por cierto, me gustó mucho que pese a la discrepancia, haya quedado publicada mi opinión. En otros blogs, no se publican los comentarios que critican negativamente representaciones o cantantes argentinos, aún cuando la crítica sea hecha sin nombre propio ni agravio.
ResponderEliminarMEA CULPA Y RECTIFICACION -
ResponderEliminarUn grupo de amigos me ha hecho llegar hace varios días una nota reclamando por lo que a su leal saber y entender había sido un tratamiento injusto de mi parte para con el barítono de este elenco.
Felizmente en mi condición de comentarista no profesional y mucho menos crítico de música, disfruto del derecho de poder rectificarme si considero que me he equivocado y así decirlo sin que se me quiebre la cara y sin sentir temor de perder respeto profesional.
Es por eso que cuando recibo objeciones las estudio detenidamente. Y hay un par de ocasiones en que me he rectificado y hasta he pedido perdón. –Como fue el caso hace unos meses en que hice una referencia al abultado abdomen de un tenor, y uno de sus amigos me escribió quejándose frente a lo cual tomé la decisión de corregir el comentario que visiblemente era inelegante innecesario y ofensivo y pedir disculpas públicamente.
Mis amigos me ofrecieron escuchar juntos una grabación que consiguieron de fragmentos de la función en cuestión y yo acepté de buen grado oírla, si bien lo que se oye en el Teatro no puede ser comparado con lo que se oye en una grabación donde el equilibrio sonoro no es el mismo y en el aspecto visual los close ups de las cámaras permiten ver detalles que por cerca que esté uno del escenario no consigue ver desde la platea.
La audición aún no se concretó porque no hemos aún conseguido coordinar agendas, pero seguramente tendrá lugar y de ella hablaré en su debido momento.
Lo que me lleva a escribir este comentario es que a raíz de la objeción planteada volvi a leer mi comentario y para mi estupor descubrí un grave error de concordancia entre sujeto y predicado que hace que el texto de hecho diga algo que no es lo que realmente quise decir. Y NOBLESSE OBLIGE, efectúo la corrección. Durante muchos días dudé de si hacerla de esta manera o escribir un nuevo comentario con la misma difusión que la nota original, pero en definitiva decidí que volver ahora sobre un tema controvertido y sin que haya podido oír aún la grabación ofrecida, sería un acto de desconsideración y falta de respeto.
Lo que yo escribi en el comentario fue
Meerapfel estuvo correcto, con algunas notorias dificultades en el ascenso hacia los agudos, que en más de una vez parecieron fuera de afinación y un timbre que en ciertas zonas de la voz no es de los más agradables. Actuó correctamente un papel que en esta versión no logra decir a que vino.
Lo que quise realmente escribir fue :
Meerapfel estuvo correcto, con algunas notorias dificultades en el ascenso hacia los agudos, que en más de una vez pareció fuera de afinación y un timbre que en ciertas zonas de la voz no es de los más agradables. Actuó correctamente un papel que en esta versión no logra decir a que vino.
Puede parecer que la diferencia es sutil o insignificante pero para mí no lo es, máxime cuando una cosa que me sorprendió agradablemente en la actuación del barítono fue precisamente la precisión y firmeza de los agudos, sin los cuales encarar cualquier papel de baríto0no verdiano sería una verdadera locura.