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Parece que me he metido en camisa de
once varas . Me han llovido correspondencias personales sobre un aspecto de mi comentario de la función de
ayer de GISELLE, algunas apoyando lo que dije , otras rechazándolo. Y lo peor es que se refieren
todas a una frase que coloqué en la nota aclarando que no se trataba de mi opinión
sino de opiniones que había oído de amigos con mas conocimientos técnicos que
yo.
Desde el primer día que comencé a
escribir notas de Opera y Ballet aclaré que no era mi intención ser tomado como
un crítico profesional, que no estoy en condiciones de ser, sino un espectador
informado que ha pasado muchas horas en su vida viendo espectáculos de este
tipo y que puede establecer comparaciones. Creo que he sido bien recibido, que
mis notas han gozado de una buena difusión para este tipo de comentarios y que
inclusive han sido reproducidas en diversos medios de difusión, alcanzando un
nada despreciable nivel de consultas que en estos días esta rozando los 115.000
En toda representación de Opera o de
Ballet hay aspectos que son muy técnicos que sólo un especialista está en
condiciones de comentar. Es por ello que por responsabilidad fui desarrollando
la técnica de cuando se presenta en una
función un aspecto controvertible que tiene características técnicas, discutirlo
con los amigos que tienen mayor bagage de conocimientos para ver si lo que yo sentí
tiene fundamentos o no. Rara vez me ha ocurrido de discrepar y que mi sensación intuitiva fuera muy
diferente de la que ellos expresaron basados en sus conocimientos. Este fue
lamentablemente el caso de determinaos momentos de la Giselle que vimos. Debido a ello en merito a la objetividad y
la justicia decidí dar mi opinión pero también incluír la de ellos aclarando
que no era mia. Y esa referencia es la que ha desatado la polémica. Lo curioso
del caso es que hay amigos técnicamente capacitados que se han ubicado de lados
opuestos de la polémica, O sea está
ocurriendo algo que ya he observado con estupor cuando de Opera se trata ,
donde me ha tocado presenciar una discusión entre dos prestigiosos profesores
de canto uno diciendo que el cantante tal había estado maravilloso y el otro
que había cantado desafinado toda la noche.
O sea que aún los técnicos tienen su
corazoncito y emiten opiniones terminantes desde lo alto de su ciencia que no
son necesariamente muy diferentes en el grado de subjetividad de las que puede tener cualquier miembro del
público.
Por ende he decidido en el futuro
seguir el consejo que me dio una prestigiosa cantante amiga : vos escribí lo
que opinas y no te preocupes tanto por lo que dicen los profesores. Si vas a
equivocarte hacelo por tus propias limitaciones y no sumes las de los demás.
Esta consideración y no ninguna de
las correspodnencias recibidas es la que me ha llevado a reeditar el comentario
de ayer eliminando la opinión que no era mia.
Quien quiera hacer llegar opiniones
discordantes tiene totalmente abiertas las puertas del blog que no rechaza ni somete
a reedicion la correspondencia recibida.
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