lunes, 18 de junio de 2012

RINALDO DE HAENDEL-TEATRO COLON


RINALDO, OPERA EN VERSION DE CONCIERTO- DIR.MARTIN HASELBOECK-TEATRO COLON



No es una proeza menor que el Teatro Colon haya conseguido estrenar en el pais la magnifica obra de Haendel y haya logrado hacerlo con un elenco casi completamente nacional, donde solo 2 de los cantantes y el Director Musical son de otras nacionalidades.
Las dos ultimas decadas han visto un resurgir de las operas del barroco o inclusive las operas  autores que como Rossini plantearon serias demandas tecnicas ornamentales  a sus interpretes, al amparo del surgimiento de toda una cosecha de especialsitas  en el genero. Mientras , paralelamente  las operas de Wagner y Verdi se van volviendo cada vez mas difíciles de programar debido a la escasez de voces adecuadas para este repertorio.

RINALDO es una bellisma opera, una colección ininterrupta de gemas musicales, propias del incomparable genio de su autor.
Puede ser objetado como teatro, como todas las operas del barroco, porque estamos como quien dice en la prehistoria de la opera. Los numeros musicales son estaticos, las letras muchas veces son una reiteración ad infinitum de una unica frase , mientras el autor explaya su rica inventiva musical, y crea un clima adecuado con la musica. Pero no hay realmente una accion teatral, se salta de una situación a otra sin que haya continuidad argumental. Todo lo que ocurre en terminos dea ccion ocurre fuera de escena y no esta musicalizado.
Por eso, contrariamente a la opinión generalizada de la critica argentina y sin animo de pretender saber mas o siquiera lo mismo que los prestigiosos profesores de musica que comentan las operas en la prensa, yo pienso que ha sido una decisión sumamente inteligente la de presentar la opera en versión de concierto. Una versión escenificada no.haria mas que resaltar la endeblez teatral de la obra, que tiene en la sublime musica su exclusiva  persuasión. Y ademas nos ahorro el riesgo de que la puesta cayera en manos de algun regisseur “ creativo “que la transformara en vaya uno a saber que cosa.O simplemnte hiciera con ella teatro dentro del teatro y se dedicara puntualmente a demolerla como historia

Claro,  la versión no escenificada aumenta considerablemente la responsabilidad de los musicos, ya que no hay elementos que distraigan la atención de una atenta audición de lo que se canta o se toca.
Pero no hubo el menor peligro en este rubro ya que la representación estuvo en manos de interpretes de absoluta calidad.
En primer lugar la orquesta , que sono como si nunca hubiera tocado otra cosa que Haendel. Una maravilla al oido.
En gran medida el éxito de la representación se debio al maravilloso trabajo de direccion del austriaco MARTIN HASELBOECK, un musico refinado que condujo con elegancia e intensidad dramatica la bellisima partitura.
El elenco tuvo valores superlativos.  En primer lugar la  deslumbrante versión del protagonista que nos dio FRANCO FAGIOLI que si ya en sus comienzos locales era una apabullante presencia vocal, ahora después de años de triunfo en Europa ha madurado adquiriendo un mayor dominio aun de un organo vocal privilegiado y logra una de esas interpretaciones que uno no acierta a imaginarse igualadas o superadas jamas. Fagioli posee una bellisima y extensa voz que en su centro y graves remeda la voz de una mezzo soprano, pero que se remonta a la estratosfera con un claro color de soprano y complementa algunas notas graves con un cierto registro baritonal, siendo un prodigio de su arte como logra pasar del grave de mezzo a la voz baritonal sin que se produzca un choque de sonidos, teniendose la clara sensación de que es siempre la misma voz. Su tecnica de coloratura es sencillamente soberbia, asi como su fuerza  expresiva. Una inrtepretacion para atesorar en la memoria.
No le fue muy en zaga VERONICA CANGEMI , soprano mendocina radicada en Europa que desplego una bellisima voz de soprano lirica, con tenues pianisimos , una agilidad pasmosa para la coloratura y una impactante fuerza expresiva.
Otro puntal de la versión fue el contratenor  canadiense DANIEL TAYLOR, con una voz mas aguda que Fagioni, que remeda claramente la de una soprano lirica ,y una agilidad y fuerza expresiva no menos lograda que sus otros dos colegas de elenco.
INESSA GALANTE, con una voz que tiende hacia el lirico spinto ( su repertorio incluye Ballo,  Aida,Manon Lescaut ) tuvo una magnifica ejecución de la coloratura , con un uso expresivo de la mezza voce y una gran fuerza expresiva. En su aria principal sorteo con gran aplomo la dificultad extra que le represento una breve interrupcion de su emision de sonido  por una fraccion de segundo al pasar de la voz forte a la mezza voce  retomando sin solucion de continuidad la nota iterrumpida en su justo tono.
VICTOR TORRES  en un papel relativamente menor, pero con una coloratura endiabladamente difícil, volvio a exhibir su perfeccion estilistca que hace que cada una de sus intervenciones en las difversas formas de repertorio que se le confien, suenen como si nunca hubiera cantado otra cosa. Magistral.
DAMIAN RAMIREZ, que posee una potente voz asopranada en los agudos, fue un solidoEustasio cantando con total convicción y justeza musical las difíciles arias confiadas a su personaje.
No soy un cultor de la opera barroca y en general tiendo a aburrirme si tengo que oir toda una opera de este estilo de una sola tirada, prefiriendo hacerlo por etapas en dias sucesivos. Pero ante tal exhibición de calidad, debo rendirme y .,como lo hice en la sala, sacar los BRAVOS  de su descanso..
Es una pena que el publico del abono no haya disfrutado en su toalidad de este que puede acabar siendo el mejor espectáculo del año. Muchas caras desconocidas identificaron a los abonados que  vendieron o regalaron sus entradas, asi como los  lugares vacios en la platea , que aumentaron considerablemente luego de los intervalos.
Es en el fondo una silenciosa condena al metodo de difusión de imponer un texto en el paquete a quien vino a a buscar otra cosa. Hay que repensar la estrategia. Porque el Colon tiene que poder seguir ofreciendo titulos como este, cuando  pude garantizar este nivel de calidad.

1 comentario:

  1. Sr. Baietti, coincido absolutamente con su apreciación de "Rinaldo". Fue una estupenda versión y me encantó completamente, incluso considerando (por las razones que Ud. bien apunta) que una ópera de Händel no es lo que uno elegiría como primera opción a presenciar. Pero la calidad musical y vocal (y el genio de Händel) obraron el milagro y fue apasionante. Única "manchita" en la velada del domingo fue olvidar dar entrada a Armida cuando tenía que "secuestrar" a Almirena, inconveniente que el excelente Haselboeck resolvió rápidamente saltando la parte.

    (Soy el pasajero con el que Ud. conversó en antes de tomar el avión de Bahía.)

    Lo saludo.

    ResponderEliminar