Estoy todavía subyugado y emocionado por lo que vi anoche. Es
un espectáculo de impactante dramatismo
y con algunos momentos de gran belleza plástica ( ej. La escena de la iniciación
sexual )
El elenco del BNS hace un trabajo ciclópeo adaptándose a una
estéteica completamente diferente a lo habitual
La bailarina rusa si se presenta en el Palacio Real de seguro
obtiene el trono y la corona con sólo mirar a sus súbditos.
Y un imenso ,agotador, consagrador trabajo de “ nuestro “
CIRO TAMAYO en un papel que lo exige todo. Baila casi todo el tiempo, se le
piden movimientos extremos uno seguido de otro y el papel además exige un grado
de entrega emotiva que es fácil quedar completamene vacío al final de la
función . No podía empezar mejor su carrera de “primer bailarín” conforme el
flamante nombramiento de que fue objeto.
Quise escribir estas breves líneas para no omitirme,. Pero como
veré el mismo reparto esta noche estaré en mejores condiciones de escribir una
nota más extensa.
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