LA TRAVIATA -juventus en el avenida

LA TRAVIATA

OPERA DE GIUSEPPE VERDI CON LIBRETTO DE  FRANCESCO MARIA PIAVE

DIRECCION MUSICAL ANTONIO MARIA RUSSO

DIRECCION ESCENICA ANA D ANNA

ESCENOGRAFIA GONZALO CORDOVA

VESTUARIO MARIA JAUNARENA

ILUMINACION GONZALO CORDOVA

CORO ESTABLE DE JUVENTUS LYRICA

JUVENTUS LYRICA

TEATRO AVENIDA

La sala del Teatro Avenida, rebosante de público y con muy pocos claros ( menos de 10 butacas ) en la Platea que seguramente corresponden a invitados que a última hora decidieron no asistir como ocurre en todos los Teatros, ratificó una vez más que la Opera no ha muerto y que el público acude en masa cuando le presentan los títulos que ha aprendido a amar. La gran incógnita que nadie ha conseguido resolver es cómo ampliar los conocimientos del público para que encuentre conocidas y agradables otras muchas óperas que se lo merecen por su riqueza musical, un objetivo que por cierto será difícil de lograr presentando algunos títulos muy elitistas y que son poco apreciados por los públicos de todo el mundo, como es el caso de la casi totalidad de lo que se ha escrito despues de R.Strauss.

Felizmente el abundante público que acudió a la cita pudo ver una versión de gran calidad de la obra de Verdi.

En primer lugar por la fantástica dirección musical de Russo, que logro un gran desempeño de la orquesta ( los preludios del 1er y 4to actos fueron dos gemas  ) y del coro que ha consolidado bajo la dirección de HERNAN SANCHEZ ARTEAGA un envidiable nivel de calidad, manteniendo un acompañamiento sutil e intenso a los cantantes a los cuales supo esperar y apoyar en los momentos más escarpados de la ornamentación verdiana.

La puesta fue fantástica. Una demostración de que el talento y el buen gusto pueden triunfar sin tener grandes presupuestos ni despliegues escenográficos hollywoodenses. Pocos elementos en escena y proyecciones bien escogidas dieron tanto el lujo de los actos 1, 2 ,3  como la desolación del cuarto donde muere Violetta.

Y ANA D ANNA  se ratifica como una gran directora escénica , que sabe como mover conjuntos pero fundamentalmente que sabe extraer de cada cantante todo lo que puede dar expresivamente obteniendo momentos de hondo dramatismo.

Contaron además con un elenco de excepción. En primer lugar por la fantástica Violetta de  CAROLINA GOMEZ  que en este papel clave donde descansa en gran medida  la obra hizo gala de gran musicalidad , una voz de hermoso timbre y llamativa extensión que  brilló en la coloratura del primer acto rematada con un sobreagudo que si no fue un mi bemol anduvo cerca de serlo. Un magistral uso de la mezza voce esencialmente en el final del acto 3 y todo el acto 4 , usada con profundo sentido del drama. Y un adecuado registro central y grave que le permitió cantar en buen nivel el segundo acto con el terrible AMAMI ALFREDO del cual salió muy airosa si bien obviamente no es la soprano spinto que Verdi concibió para ese momento. Por si todo esto fuera poco, Carolina es una estupenda actriz. Animalito sensual y divertido en el comienzo del  primer acto fue evolucionando con su personaje hasta llegar al final que en en sus manos adquirió un hondo dramatismo.

ERNESTO BAUER  fantásticamente bien maquillado para parecer tener la edad de Germont y con un cuidado trabajo de los movimientos que ratificaban esa impresión, en lo vocal fue un Germont seguro, delicado en el fraseo y con gran calidad musical. Uno de sus mejores trabajos.

ROCIO ARBIZU fue casi un lujo exagerado con su opulenta voz y su temperamento para el papel decididamente menor de Flora y MARIA ALMEIDA fue una Annina a la vez muy sentida y agradable de oír.

FELIPE CUDINA BERGOVIC como el Dr.Grenvil supo aprovechar el único momento de lucimiento que proporciona la ingrata parte, que es la escena del 4to.acto donde examina a Violetta y con gran sutileza sus expresiones faciales desmintieron el optimismo de sus declaraciones al punto que su frase final LA TISI NON L /ACCORDA CHE POCHE ORE fue casi redundante porque ya estaba dicho con el rostro.

Gran trabajo actoral de SEBASTIAN RUSSO seguramente muy orientado por Ana D Anna dio muy bien la imagen del mozalbete poco mundano encandilado por la mujer mayor en el primer acto, el hombre joven ya más desenvuelto y seguro de si luego de convivir con Violetta, el hombre desesperado y furibundo del acto 3 y el hombre tierno enamorado y doliente que asiste a la muerte de la mujer que ama en el cuarto acto. Vocalmente enfrentó un papel que no es el que mejor cuadra a sus recursos vocales de tenor esencialmente donizettiano o rossiniano y tuvo dificultades en las escenas en que se pide un mayor peso vocal ( caso la escena en que le arroja el dinero a Violetta ) luciéndose en cambio en los momentos de ternura en los que pudo usar su persuasiva mezza voce, como por ejemplo AH SI CHE FECCI del final del tercer acto y toda la escena final del 4to.