EUGENIO ONEGUIN
BALLET CON COREOGRAFIA DE JOHN CRANKO Y MÚSICA DE
CHAICOVSKI- ARREGLOS MUSICALES DE KURT HEINZ STOLZE
REPOSICIÓN COREOGRÁFICA DE AGNETA Y VICTOR VALCU
SUPERVISIÓN ARTÍSTICA DE REID ANDERSON GRAEFE
ORQUESTA SINFÓNICA DEL SODRE ( OSSODRE)BAJO LA DIRECCIÓN MUSICAL DE
ENRIQUE CARREON ROBLEDO
ESCENOGRAFÍA Y VESTUARIO PABLO NUÑEZ
ILUMINACIÓN – JOSE LUIS FIORUCCIO
PRODUCCION DEL BALLET NACIONAL DE CHILE
BNS
AUDITORIO ADELA RETA-SODRE
Una bienvenida reposición de la magnífica puesta
brindada años atrás que reproduce el deslumbramiento original en primer lugar
por la bellísima escenografía, con puntos muy altos en los suntuosos salones de
los palacios y en la fantasmagórica escena del duelo. En ambos casos la
iluminación cumple un papel esencial, potenciando el impacto visual y dramático
de la puesta, que cuenta además con un bellísimo despliegue de vestuario.
Esta vez fue posible escuchar el ballet ejecutado
en vivo por la orquesta del Sodre, superados los problemas que lo impedían , y
con una excelente dirección del maestro invitado . Es evidente que el proceso
de renovación emprendido recientemente ha rendido sus frutos y el sonido de la
Orquesta ha ganado en belleza e intensidad constituyéndose en un factor importante
en el éxito del espectáculo.
Una gran noche del cuerpo de baile al cual la
coreografía concede generosas oportunidades de lucimiento.
En el plano de los solistas, muy buena, elegante composición de JOYCE
ALVES como Larina ( inexplicablemente no
figura en el programa ) .
Muy buena actuación de SANDRO FERNANDEZ como el Principe Gremin con buen lucimiento
en el pas de deux del último acto.
Bella actuación de CARELIZ POVEA a quien siempre es
posible destacar por sus actuaciones y que finalmente está teniendo las
oportunidades que no le llegaban.
Descomunal actuación de MARIA NOEL RICCETTO, bellísima
,grácil en todos sus movimientos y con una compenetración total con el
personaje que alcanzó grandes momentos de emoción en las escenas finales. No es
casual que esta creación le haya valido el premio BENOIS de la danza ( una suerte de Oscar ) y tampoco
es casual que el BNS haya montado para ella este ballet con el que se luce
ampliamente y que –tristemente-inicia el proceso de su retirada de los palcos,
que se producirá con el próximo título que es MANON.
BRIAN WALDRUP es un excelente bailarín dotado de
una sólida técnica, gran fuerza física ( que esta coreografía pone bien a
prueba en un par de escenas donde sus virtudes como porteur son muy exigidas ) y es un intérprete dedicado. A
mi personalmente no me gustó la concepción del personaje que a mi juicio fue un
poco sobrecarqado en sus aspectos negativos haciendo de él el “ malo de la película
“ que no es la idea. Oneguin es altanero, egocéntrico, arrogante pero no un
malvado.
Dejé intencionalmente para el final la actuación de
DAMIAN TORIO como Lensky. Estuvo notable. Damian siempre se ha caracterizado
por su sólida técnica de bailarín clásico. Pero ha sido en los últimos 3 o 4
espectáculos que ha logrado poner de manifiesto una fuerza dramática y una
compenetración con sus personajes que antes no se le daba con la misma
facilidad. Esta noche logró momentos de intenso dramatismo en la escena del
reto y en la escena del duelo.
Por eso no asombró a nadie , salvo al propio Torío
que fue evidente que no lo esperaba que IGOR YEBRA en unas breves palabras en las cuales
agradeció a los coreógrafos por venir a compartir con nosotros sus
conocimientos , a Cranko por haberle legado a la humnaidad un ballet de estos
quilates, a María Noel por su estupenda creación, al cuerpo de baile porque no
hay estrella que brille si no tiene un gran cuerpo de baile detrás, terminó
anunciando que DAMIAN TORIO a partir de hoy ha pasado a ser PRIMER BAILARIN en
el elenco, anuncio que fue recibido con emoción por el interesado que fue obvio
que no lo esperaba, sus compañeros y la platea que prorrumpió en un sonoro
aplauso.
Felicitaciones.
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