sábado, 10 de junio de 2017

MARTA GRUNI




MARTA GRUNI
OPERA DE JAURES LAMARQUE PONS
SEGÚN LIBRO DE FLORENCIO SANCHEZ
DIRECCIÓN MUSICAL  FERNANDO CONDON
DIRECCIÓN ESCÉNICA  HUGO BLANDAMURO
ESCENOGRAFÍA Y VESTUARIO BEATRIZ MARTINEZ
 CONJUNTO DE CÁMARA DEL SODRE
AUDITORIO NELLY GOITIÑO



Estrenada hace exactos 50 años en el Teatro Solís en una versión donde descollaba Virgina Castro en el papel protagónico, la obra fue repuesta 8 años después en el TEATRO DEL NOTARIADO y 17 años más tarde en el SODRE , que ahora la repone 27 años después de está última representación. Si esta progresión se mantiene de seguro la he visto por última vez.
La Opera en sí es ante todo un excelente texto teatral con una estupenda pintura de ambientes y estilos de vida ( los arrabales de Montevideo ) y una tragedia que avanza irremediablemente hacia su culminación. Es un texto excelente, con personajes muy bien dibujados.
La musicalización es agradable, se oye con placer, pero dista de ser memorable. La orquestación ( aquí perjudicada por la reducción de instrumentos para adaptarse a la falta de foso del Teatro y a las dificultades para contar con la OSSODRE, que por lo visto no se limitan al ballet ) si bien con una excelente dirección musical y un estupendo rendimiento de los músicos, coquetea con lo folklórico y con el modernismo con resultados más bien anodinos. Las partes de los solistas son más frecuentemente habladas o recitadas que cantadas y la invención melódica es muy limitada. No obstante ello la riqueza dramática del texto consigue su impacto.
Y aquí se ha visto muy beneficiada con un elenco de ensueño que valoriza cada uno de los papeles. En primer lugar la estupenda SANDRA SILVERA que saca a lucir su garra dramática y su impresionante extensión  vocal que no se amilana ante las exigencias de la partitura al registro grave, que parecerían hacer el papel escrito más bien para una mezzo si no fuera porque hay fuertes exigencias en los agudos. Es un desperdicio tener un valor de los kilates de Sandra y oírla muy de tiempo en tiempo dada la escasa cantidad de espectáculos de Opera que se ofrecen en la ciudad. Y me quedo con rabia pensando qué buena Tosca que hubiera sido.
A su lado KAYCOBE GOMEZ exhibió una bellísima voz lírica con un magnífico  registro agudo al par que gran desenvoltura escénica. MARCELO OTEGUI impactó con su fuerza vocal, que me llevó a preguntar si estaba amplificado ( no lo estaba ) y en un par de oportunidades su generoso registro grave. FEDERICO SANGUINETTI y GERARDO MARANDINO  dieron retratos sutilísimos de los crápulas de la obra, ambos luciendo importantes condiciones vocales. ALVARO GODIÑO excelente como el ciego cantó estupendamente la única aria en sentido estricto de la obra. Y un gran trabajo de los restantes solistas.
Una escenografía modesta pero funcional y que dio muy bien el ambiente de la obra. Y una excelente dirección escénica que sacó muy buen partido del estupendo elenco puesto a su  disposición.
VALE LA PENA VERLA.









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