SEMIRAMIDE- CIA LIRICA DEL SUR

SEMIRAMIDE

OPERA DE GIACOMO ROSSINI

LIBRETTO DE GAETANO ROSSI

BASADO EN LA TRAGEDIA SEMIRAMIS DE VOLTAIRE

DIRECTOR MUSICAL Y ESCENICO CESAR TELLO

ESCENOGRAFIA  ZACARIAS GRANNI

LUCES ALEJANDRO DIAZ

VESTUARIO CESAR TELLO

CORO ESTABLE DE CLASICA DEL SUR

ORQUESTA AD HOC

CIA. LIRICA CLASICA DEL SUR

TEATRO LUZ Y FUERZA.

Contra todas las apuestas en estos tiempos de aprietos financieros que ya se han llevado puestas a algúnas compañías de mayor porte, CLASICA DEL SUR firmemente anclada en el teatro Luz y Fuerza ha mantenido la continuidad  de sus temporadas líricas, que se han prometido apuntar a dos objetivos :

-acercar al público títulos que no vienen siendo presentados en los teatros Oficiales, con el Colón ofreciendo apenas 5 operas tradicionales en cada año y el Argentino cerrado tan sine die como el Alvear.  o en las Cias. mayores del off Colón .

- y acercar a la Opera en general a un público que ha quedado excluído de la funciones del Colon por el altísimo precio de las localidades, especialmente ahora que se han eliminado las antiguas funciones extraordinarias con  precios reducidos.

En este sentido hay que aplaudir de pie el tesón del maestro Tello y sus colaboradores directos  que a puro pulmón, careciendo de recursos estatales o de grandes sponsors están consiguiendo llevar adelante estos proyectos.

Es claro que quien concurre al TEATRO LUZ Y FUERZA y abona  los 350 pesos que cuesta la entrada, no puede aspirar a ver una superproducción con escenarios costosos y cantantes famosos como ocurre  ( a veces ) en  el Colon , donde las entradas cuestan unas 12 veces más caras.

La Cia opera necesariamente con escenografías sumarias, donde se usa más el talento que el despliegue ( Y ME PARECIO FANTASTICA LA CONCEPCION DE ZACARIAS DE PRESENTAR LAS PAREDES DESNUDAS DEL ESCENARIO, PROYECTANDO SOBRE ELLAS MOTIVOS DEL REINO DE SEMIRAMIDE ),  donde la iluminación juega un rol preponderante  y donde el vestuario en general compensa con un asombroso despliegue visual las limitaciones de la escenografía, que por otra parte está también determinada por las escasas dimensiones del Escenario del Teatro. Y debe además recurrir al talento y las condiciones naturales de un conjunto de cantantes jóvenes , con reducida experiencia en los palcos escénicos,  que suplen con condiciones naturales y gran esfuerzo de preparación su falta de experiencia.

Es claro que en algunas operas las limitaciones pesan más que en otras y en el caso de SEMIRAMIDE  es quizás donde sean más notorias.

SEMIRAMIDE es la última Opera seria que escribió el gran Maestro y contiene varios fragmentos que son de lo mejor que haya salido de su pluma.

Pero es además una Opera que a muchos de nosotros nos resulta bastante  tediosa por su extensión ( aún con cortes el espectáculo duró más de 3hs 30 ), con un  libretto que no llega a conmover o suscitar interés y personajes que no tienen real encarnación y no pasan de lo epidérmico, lo cual es compensado por las proezas vocales que se  les exige a sus solistas que enfrentan algunos de los momentos más difíciles de toda la historia del bel canto. Y para colmo no son ,1 ni 2 papeles sino varios, al punto que yo me animo a apostar que si en Europa dos Teatros se atreven a programar SEMIRAMIDE  al mismo tiempo, uno de los dos tiene que desistir porque es imposible reunir en un mismo día dos elencos que encaren con  mediana posibilidad de éxito semejante obra.

Dejando de lado todo paternalismo y con una mano en el corazón mi opinión  sobre el espectáculo es la siguiente :

Magnifico trabajo de preparación y dirección musical de Tello que es notorio ensayó la obra con mucho esfuerzo, lo cual  se notó en el perfecto ensamblado tanto de la orquesta y el coro y los solistas, que cantaron prácticamente todo el tiempo sin siquiera dirigir una mirada al maestro y sin cometer ningún error como entrar a destiempo, por ejemplo. La obra fluyó como si todos hubieran estado cantando SEMIRAMIDE desde hace años y la tuvieran totalmente dominada.

Por otra parte tanto el coro como la orquesta , que a veces han sido el talón de Aquiles de estos espectáculos  sonaron espléndidamente  y sólo me atrevería a señalar que como es obvio la pequeña orquesta  convocada, no pudo hacer total justicia a la obertura que es una estupenda pieza sinfónica que a menudo se ejecuta por separado de la Opera.

En el elenco solista hubo virtudes a destacar  pero tambien limitaciones.

En verdad la obra es tan difícil de cantar y son tan pocos los cantantes  en el mundo que pueden medirse con ella que si alguno de los jóvenes cantantes reunidos por Tello estuviera totalmente a la altura de la partitura, ya no estaría en Buenos Aires sino circulando por el primer mundo embolsando los jugosos cachets de los grandes teatros que se estarían disputando sus servicios poco menos que a golpes de puño-

Por lejos la mejor actuación de la noche fue de la mezzo LAURA ARANDA como Arsace. Esta joven  mezzo que tantas satisfacciones le ha dado ya a la Cia. logró una valiosa interpretación .-Laura no es la contralto coloratura que  la obra pide ( Horne o Podless por ejemplo ) pero negoció con gran seguridad musical los difíciles graves y se lució ampliamente cuando pasó al centro y el agudo. Buena técnica de coloratura, quizás más al nivel de Donizetti que de Rossini que es realmente imposible en este rubro. Y una muy convincente actuación. Despues de verla en el papel es imposible no decir que ARANDA ES UNA MEZZO CON TODA LA BARBA.

Semirámide es un papel absolutamente imposible de cantar. Sólo grandes sopranos con  voces de  anormal extensión como Caballe,Sills y otros monstruos de este nivel han conseguido hacerle plena justicia a un rol que es para una soprano dramática de agilidad.  Al no tener semejante raridad en el elenco las Cias. han optado sistemáticamente por  sacrificar  los momentos más dramáticos y escalar una soprano ligera que sea capaz de afrontar las estratosféricas notas que Rossini le exige. MICHELLE FOGEL deslumbró en todo lo que fuese sobreagudos y ornamentaciones, cantó a la defensiva en los momentos donde se pide una voz más pesada, logrando lo que yo llamaría una razonable aproximación al papel

ALEJO ALVAREZ CASTILLO como Assur volvió a impactar con la belleza de su voz de bajo cantante. Tiene la obligación de crecer y resolver los problemas técnicos que aún no domina del todo y pàra ello debería encontrar un buen maestro que lo oriente, porque la voz es muy valiosa y debiera rendir una carrera importante.

EDDIE CARMONA fue en general un sólido Oroe, con algunos problemas no del todo resueltos en la zona aguda de la voz. Muy buen actor.

SARA FLEMING fue una correcta
Azema , con un timbre vocal algo metálico en exceso y con buena presencia escénica.

FABIO GOMEZ ROSA  fue un sólido sombra de Nino y FABIANO ARCE un Mitrane con una bella voz de tenor y algo de inseguridad escénica.

El papel de Idreno es poco menos que imposible de cantar , por la terrible ornamentación y las imposibles notas que le exige a cada paso.

Según tengo entendido  DIEGO LOYOLA  fue llamado in extremis 2 semanas atrás , cuando los otros llevaban  más de 3 meses de ensayos, y es motivo de asombro el dominio musical sobre la partitura que habla a las claras de alguien que domina ampliamente la lectura musical de un texto tan complejo como el que propone Rossini. Pero el papel es demasiado exigente,al punto que se me ocurren pocos tenores que puedan hacerle frente ( Kunde quizás en el presente, Merritt o Aler en el pasado reciente ) –Loyola luchó con tenacidad contra ese difícil enemigo, triunfando en la mayor parte de las ocasiones , pero sucumbiendo en otras , lo que ocurrió con más frecuencia en el final de la obra adonde llegó visiblemente cansado y tuvo algunos momentos que es mejor olvidar.