IL TROVATORE
OPERA DE GIUSEPPE VERDI CON LIBRETTO DE
DIRECCION MUSICAL –RONALDO ROSA
DIRECCION ESCENICA-
BORIS
ESCENOGRAFIA -DIEGO GUERRERO Y HUGO CICHIRO
CORO DEL INSITTUTO MUNICIPAL DE MUSICA DE
AVELLANEDA
ORQUESTA ESPECIAL PARA EL EVENTO
MELODRAMMA – TEATRO AVENIDA
Una nueva Compañía privada que presente
espectáculos de Opera es siempre una buena novedad. Melodramma ya ha organizado
algunos otros espectáculos, pero hasta este momento no se ha constituído en una
Compañía estable con temporada anual como BUENOS AIRES LYRICA ,JUVENTUS hasta
hace un tiempo LA CASA DE LA OPERA. Cabe esperar que venga a cubrir el vacío
dejado por dicha Institución que ya no presenta espectáculos regularmente. Para
ello tendrá que ir superando poco a poco
todos los obstáculos por los que pasaron sus hermanas mayores, comenzando por la
obtención de sponsors y recursos sin los cuales todo espectáculo de opera queda
condenado a una cierta precariedad, precariedad que en este caso se manifestó
tanto en la parquedad de los elementos escenográficos, como la pobreza del
vestuario, la necesidad de recurrir a una orquesta reunida para el evento que
todavía no tiene práctica de tocar en conjunto y un coro que normalmente se
ocupa de otros menesteres y que requiere una dosis mayor de ensayos que los
posibles para llevar todo a buen puerto.
Hay que dar un crédito de confianza a quienes emprenden
esta tarea y observar hacia sus esfuerzos un respetuosa benevolencia, que no
debe confundirse con complacencia porque eso en vez de respeto sería por el
contrario faltar el respeto a los artistas involucrados.
Fue un TROVADOR pobre en lo visual ,es imposible
soslayarlo y con algunos graves desajustes entre la orquesta y los solistas y con
el coro, que además exhibió una tendencia a no sonar al unísono, con entradas
que por momentos parecieron las de una partitura a varias voces.
Un factor complicante fue la regie. BORIS esta vez acertó mucho más que lo que erró.
Con la frecuentación de los escenarios que finalmente se le ha dado en los
últimos tiempos va ganando oficio y está aprendiendo a mostrar sus virtudes (
en general motiva y marca muy bien a sus intérpretes ) y ponerle algo de coto a
sus limitaciones ( lo peor es ese
perpétuo deseo de ser original que le hace embarcarse en cursos de acción insólitos
que a menudo no combinan con la lógica teatral y/o la partitura. En general
estos ataques de creatividad lo acometen en escenas colectivas y preferentemente
en finales de acto, como el final “ a la MANON LESCAUT “ del tercer acto de LA TRAVIATA de Rosario
Aquí tuvo uno muy pero muy feo en la escena del
Convento. Como recordarán quienes hayan visto más de una vez IL TROVATORE ( YO PERSONALMENTE PERDÍ LA CUENTA HACE RATO
) Leonora creyendo a Manrico muerto decide internarse en un Convento. Cuando
está por ingresar, junto con las monjas, irrumpe el Conde con sus soldados con la intención de raptarla y
casarse a la fuerza con ella,siendo interrumpido por la llegada de Manrico con
sus gitanos que estando en mayor número que los soldados salen triunfadores y
Manrico se lleva a Leonora.
Pues bien, aquí cuando se produce el ataque los soldados
se dedican a forcejear con las monjas con la evidente intención de violarlas.
En eso llega Manirco con un amigo (los gitanos, pocos, aparecen pero quedan
detrás ) y ellos dos solos dominan al Conde y Ferrando que no obtienen ayuda de
los soldados muy ocupados en una labor más placentera que guerrear. Para
completar el panorama, Leonora en persona traba un combate espada en mano con
el Conde, haciendo que el absurdo sea total.
Hubo pequeños detalles en una y otra escena pero no
estoy con ánimo de hacer inventario y ninguno compite en gravedad con este
gravísimo traspié.
Pasando a lo sonoro, la orquesta sonó pasable y
poco más, con tempis algo antojadizos, por momentos lentos por momentos
inflexibles. El coro tiene buenas voces ( ESPECIALMENTE LOS TENORES ) pero
tiene como ya dije dificultades para cantar al unísono y para ensamblarse con
la orquesta.
ANNABELLA CARNEVALI ( Azucena ) pareció salida de
otro mundo con un vozarrón potente y lindo de oír en toda su extensión,
absoluta seguridad musical, extensión acorde con la partitura y un registro
grave acontraltado que magníficamente usado dramáticamente le dio a su Azucena
una garra dramática excepcional. Cerrando los ojos uno podía creerse en la
Scala o la_Staatsoper ( no exagero ) –No casualmente la escena más excitante de
la noche fue la escena de la detención de Azucena donde cabalgó con generoso
volumen por encima del coro. Una de las mejores interpretaciones del papel que
he visto en mi vida.
Una voz importante, agradable de oír y en total
dominio de la partitura la de CRISTIAN
DE MARCO como Ferrando, a quien se le
puede objetar ( no es su culpa ) la apariencia juvenil y la tendencia a reir en
todos los finales de cuadro ( seguramente alguna idea “ genial “ de la regie,
ya que Azucena también prorrumpe en carcajadas cuando se la llevan presa para
quemarla)
ENRIQUE GIBERT MELLA posee una poderosa voz
baritonal, comandando el arduo registro agudo de la parte, y por momentos logró
impactar. Pero en otros momentos su voz exhibió el previsible desgaste de una prolongada y exitosa carrera,
en particular cuando el director no consiguió ponerse de acuerdo con él en los
tempi ,y a menudo lo hizo correr hacia la próxima nota cuando a él le hubiera
venido mucho mejor unos segundos para recuperar el folego. Ese ritmo
apresurado y la imposibilidad de
respirar ocasionó en algunos casos algunas notas no del todo logradas, lo cual
es una lástima porque el cantante las
tiene y con generosidad. Actoralmente impecable.
REINALDO SAMANIEGO, un joven tenor lírico paraguayo
residente en BA tiene de Manrico solamente algo que en general no tienen
quienes encaran la parte : la apariencia juvenil de alguien que todavía no ha
llegado a los 30 años y una convincente interpretación de sus ímpetus propios
de la edad. Lamentablemente carece de la voz del papel. Su voz es para obras
que requieran un menor peso vocal ( Don
Pasquale por ejemplo ) por lo que no pudo cubrir ni de cerca la parte siendo en
algunos momentos embarazoso oírlo. Con todo es una valiosa adquisición para el
medio porque es músico, tiene una bella voz especialmente el centro y
seguramente cantando lo que debe cantar debe tener un muy buen rendimiento. Curiosamente uno de sus mejores momentos fue
el DI QUELLA PIRA cantado con todas las ornamentaciones que muchos soslayan (
yo las descubrí tarde en mi carrera como espectador de TROVATORES
cuando oí al gran CARLO BERGONZI )- Y fue inteligente si bien poco ortodoxa su solución para el Do final :
esperó que el coro y la orquesta se serenaran y emitió la nota en
pianísimo ( o falsete , no sabría decir bien cual )
Es el tercer TROVATORE que le veo a HAYDEE DABUSTI.
El primero hace unos cuantos años en LA PLATA. Dabustí estaba comenzando a
progresar como actriz pero le faltaba bastante, y también estaba comenzando a
dominar la técnica de los pianísimos y recuerdo
que flotó un par de bellísimas notas en la escena del Convento, pero canto el
aria del cuarto acto mayormente a viva voz.
Años después la DABUSTI que se presentó en el Coliseo tenía ya otro
dominio de las artes escénicas y su fraseo verdiano se había vuelto
inobjetable.
La versión de anoche no puede compararse con
justicia con las dos anteriores porque la cantante, tal como se anunció antes
de empezar la función , sufría de una laringitis que limitaba sus
posibilidades. Impecable y segura en toda la zona grave y en el centro de la voz,
que sonó bien más oscura que en la reciente DESDEMONA, dio en los agudos un
verdadero examen de técnica de canto, del cual pudo retirarse con una
felicitación de la mesa. Conocedora de todos los recursos a su disposición y
del limitado uso que podía hacer de sus agudos extremos, cantó con gran pericia
técnica y no llego a sufrir ningún accidente, si bien algunas notas emergieron
apretadas o con una sonoridad metálica que no es la suya normal. Y no cortó la caballetta del cuarto acto que
en realidad fue uno de los mejores momentos de su actuación.
Hay cosas que a veces duele decirlas pero que uno
tiene que decir porque para eso opina.
Para mí la intérprete debe someter urgentemente a revisión su costado actoral,
que está sufriendo una involución.
Cierto que tanto en Otello como aquí contó con ropas, pelucas y maquillaje
diseñados por un enemigo jurado, pero además hay detalles de su expresividad
corporal que han perdido elegancia, sutileza y debe luchar por recuperar el
nivel que había alcanzado, especialmente porque la esperan el Colón y un papel
de Reina . ( ciertamente no la ayudó nada en la empresa de proyectar una delicada
y femenina protagonista, el hecho de que tener trenzarse a duelo, espada en
mano con uno de sus pretendientes )