ENTREVISTA CON PEDRO PABLO PRUDENCIO,
EL DIRECTOR MUSICAL DE LA OPERA OTELLO QUE EL SODRE PRESENTARA EN LOS PRIMEROS
DIAS DE NOVIEMBRE.
Prudencio podría muy bien ser objeto de un conflicto de límites ya que podría
decirse que tiene tres nacionalidades. El se siente chileno y reside en Chile.
Su esposa es chilena y eso es en definitiva lo que cuenta. Pero nació en
Bolivia (LA PAZ) y poco tiempo después de haber nacido su familia se trasladó
por razones de trabajo a HANNOVER donde pasó toda su infancia. El ambiente
familiar era musical ya que su padre era profesor de piano, y el comenzó a
estudiar piano a los 5 años con su padre.
A los 10 años la familia se trasladó a
Chile donde Prudencio termina sus estudios como colegial y decidido a seguir la
carrera musical vuelve a Alemania donde estudia dirección coral y orquestal en
Hannover. Trabaja durante un tiempo como asistente del Director de Coro de la
Opera de Hannover, donde el trabajo es muy intenso ya que el Teatro sigue el
sistema de repertorio presentando funciones todos los días menos Lunes que es
el día de descanso y menos Sábados y Domingos en los que hay dos funciones.
Durante la temporada se presentan alrededor de 40 títulos diferentes. Todo esto
es posible mediante un mecanismo organizativo muy bien aceitado y mediante un
sistema de turnos que posibilita que los músicos no toquen todos los días ya
que hay descansos rotativos.
Su retorno a Chile se debió en gran
medida a la decisión de formar una familia, casándose con su novia con la cual
no podía más seguir manteniendo un noviazgo a la distancia.
Comenzó entonces a trabajar como
director independiente y a dar clases de Música de Cámara y Repertorio
Operístico. Comienzan a contratarlo para dirigir en el TEATRO MUNICIPAL DE
SANTIAGO DE CHILE, en general para dirigir el ELENCO ESTELAR, que es el nombre
con que se anuncia al elenco mayoritariamente local por oposición al
internacional que suele ser dirigido por directores también traídos de fuera.
Su primera experiencia en Latinoamérica
es con el Maestro Neschling en SP donde trabaja como Asistente de Dirección.
Recibe invitaciones de La Plata para dirigir conciertos y posteriormente lo
llaman para trabajar como Asistente de Dirección de Alejo Pérez en la puesta
del Oro del Rhin y para dirigir una TRAVIATA que lamentablemente no pasó de los
ensayos debido a un conflicto gremial. En los ensayos de esa Traviata, que es
su mayor frustración, tiene un recuerdo muy vívido del ensayo del ADDIO DAL
PASATO con FLORENCIA FABRIS (que alternaba con PAULA ALMERARES). El quiso
profundizar con ella la segunda estrofa del aria, usualmente omitida, donde se
profundiza toda una serie de preocupaciones de Violetta que antevé su muerte.
Recuerda que después de haber analizado el texto juntos Florencia comenzó a
cantar el aria y el resultado fue emocionante. Lamentablemente la obra no se
estrenó y una semana después estando en el exterior dirigiendo, le llegó la
noticia de su fallecimiento que lo dejó muy entristecido.
En Buenos Aires ha colaborado ya con 3
títulos de BUENOS AIRES LIRICA, un Rapto en el Serallo con puesta de Maritano
el regisseur de este Otello, la gala WAGNER y el reciente WERTHER del Teatro
Avenida. Recordando que la puesta del Rapto ( que no vi ) fue bastante
controvertida, con la acción desarrollándose en un Aeropuerto y la intervención
de un grupo terrorista, cometo la imprudencia de preguntarle qué le había
parecido , me contesta que funcionaba y pasa luego a explayarse en una profunda
y minuciosa explicación detalle por detalle de la obra de Mozart y lo que
significó en su biografía, una explicación interesantísima que hará que nunca
vuelva a ver Rapto de la misma manera, pero que a los efectos del reportaje
funciona como una digresión , salvo que me permite hacer dos observaciones
sobre su personalidad : es un gran estudioso de lo que hace, un detallista casi
al nivel de lo maniático y un perfeccionista.
Lo último que ha dirigido es una Opera
española en Madrid titulada EL PUBLICO que se basa en un texto de GARCIA LORCA
y que tiene la particularidad de integrar música clásica con música flamenca en
un lenguaje nuevo particularmente complejo por la necesidad de integrar los dos
lenguajes y por tener que trabajar con intérpretes que vienen del flamenco y
que lo dejaron absolutamente deslumbrado.
Antes de ello dirigió una GALA
PRESIDENCIAL que fue trasmitida por TV (me ofrece el link y no pasé media hora
de haber retornado a casa que ya me lo había trasmitido), donde él elogia
fundamentalmente el excelente trabajo de backstage que se hizo que permite al
público entender mejor qué es una ópera y como se llega al espectáculo que
están presentando.
Incidentalmente extiende un entusiasta
elogio a la musicalidad, la fuerza interpretativa de un barítono argentino que
es además una estupenda persona. Me dice que no me lo puedo perder. (OMAR
CARRION, JEJE –VAYA NOVEDAD LE DIGO)
El cree fervientemente en la necesidad
de preocuparse por la creación de nuevas audiencias, porque de lo contrario
nuestro arte tenderá a desaparecer a medida que vaya desapareciendo el público
antiguo. Es por eso que asigna un gran valor a una experiencia que se está
llevando en Chile realizando espectáculos orientados a un público familiar, con
música de calidad y función didáctica. Quisiera extenderlo por Latinoamérica y
ha tenido conversaciones al respecto con el Teatro Colón-.
Le pregunto por otros Teatros en Chile
y me menciona como muy importante el de Frutillar y la existencia de salas en
Rancagua y Concepción.
Derivo a preguntarle si conoció a mi
amigo el prematuramente fallecido Maestro Patron Marchand , y me dice que lo
conoció pero muy fugazmente pero al que conoce muchísimo es a FERNANDO PUIGROS
a quien tiene por un sabio en materia de opera, un verdadero archivo ambulante
de la OPERA DE SANTIAGO y un consejero de facto de todo el mundo por lo mucho
que sabe.
Está muy feliz de estar en Montevideo,
ciudad que le ha encantado (hace particular mención de la Rambla, por donde le
gusta caminar) y le ha impresionado muy favorablemente el espíritu de
colaboración y el deseo de perfeccionar y mejorar que tienen los participantes,
por más que existen algunas dificultades organizativas que dificultan los
ensayos por los horarios de los cuerpos que son difíciles de coordinar.
Está muy entusiasmado con dirigir esta
Opera que es fantástica, profundamente dramática y con la producción. A él le
gustan las puestas arriesgadas, las que llevan a que el público al retirarse de
la sala hable de la Opera que ha visto, de su mensaje y no de adonde irán a
cenar.
Le fascina el personaje de Otello y la
concepción de esta versión que se centra en la inseguridad más que en los
celos. Otello que en el fondo se sabe un traidor de los suyos porque se ha
plegado al poder de Venecia, en el fondo duda de la fidelidad de todos y además
tiene todos los motivos para desconfiar de Desdémona que para seguirlo ha
traicionado a su padre. Es por eso que Iago, que es un hombre de gran poder de
observación ha descubierto ese punto débil suyo y lo explota.
Ha trabajado poco con Ventre que recién
ha llegado de Italia donde estaba cantando precisamente Otello, de modo que me
habla más del Otello de Folger con quien ha estado ensayando mucho más y cree
que está logrando un gran retrato del personaje.
Cree que van a lograr un gran
espectáculo.
Precisamente una de sus aspiraciones
futuras sería organizar alguna gala Wagneriana o alguna Opera de Wagner
reuniendo a Marambio y Folger que tienen voces ideales para algunos títulos de
ese repertorio.
Le pregunto cual Opera le gustaría
dirigir en algún momento y sin vacilación me contesta TISTAN E ISOLDA- Tome
nota el SODRE que tiene una Isolda nacional, muy oriental ella.
Un pequeño detalle al final de la
conversación muestra su detallismo y el estado de alerta total. Al levantarme
para retirarnos dejo caer accidentalmente mi lapicera y antes mismo de que yo
me diera cuenta él ya la había recogido y me la estaba entregando. Y enseguida
repetimos la operación con mi gorro. Con un hombre con ese grado de alerta, es
previsible que no haya imprevistos o que los mismos sean sumariamente
despachados.
Luis G. Baietti
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