LUISBAIETTI-OPERA Y BALLET: RECITAL SIRI-LUJAN MIRABELLI-AYUB -SODRE

Cuando a principios de año el SODRE anunció su temporada 2020 se hizo evidente que la situación presupuestal había determinado que este año la temporada fuera más bien débil. Y esto fue aún más notorio en el caso de la OPERA que siempre ha sido la cenicienta del AUDITORIO y que este año se vio reducida a un único título allá por el final del año.

Buscando en parte compensar esta pobreza se programaron diversos recitales y uno de los más atractivos en el papel fue el que reunió a MARIA JOSE SIRI, soprano uruguaya de destacada actuación en Europa donde ya ha cantado en teatros legendarios como los de PALERMO, MILAN, VIENA, SAN PETERSBURGO y la destacada mezzo argentina MARIA LUJAN MIRABELLI de la cual es además amiga personal. Se sumaba a ello haciendo el programa definitivamente atractivo el acompañamiento al piano de MARCELO AYUB que es uno de los más destacados pianistas acompañantes. Había gran expectativa por el concierto y felizmente fue satisfecha con un muy buen recital con algunos momentos de brillantez.

MARIA JOSE Y MARIA LUJAN eligieron un repertorio exigente , concebido para sopranos y mezzos “ con coglioni “ como dirían en Italia ( y no lo voy a traducir, por pudor, pero quiere decir lo que parece ) . Son arias y dúos que exigen voces importantes, fuertes, con buena extensión vocal y un importante temperamento.

Y ambas cantantes llenaron muy bien los requisitos, con excelentes momentos en el duo de Aida, de Norma, las arias de soprano LA MAMMA MORTA, PACE PACE donde Siri exhibió una voz que creció mucho en volumen, ha ganado peso ( y no es una alusión a su cambio físico ) en el centro y adquirido buenos graves , sin perder la delicadeza necesaria para arias como IO SON L UMILE ANCELLA, y O MIO BABBINO CARO donde la soprano spinto dio paso a la lírica de antaño y pudo sorprender con bellísimos pianísimos

Luján está pasando por un momento mágico en su carrera y logró impactantes versiones de OH DON FATALE, VOI LO SAPETE y sobre todo ESSER MADRE E UN INFERNO de LA ARLESIANA con la que obtuvo hace unos meses el más resonante éxito de una extensa carrera.

Es claro que voces de este porte no son voces de cámara y que hilando fino puede encontrarse aquí y allá un sonido menos agradable que otro, un agudo algo tirante , una dosis de vibratto . ( como me dijo una vez un tenor : no es lo mismo manejar un camión con acoplado que un Fiat 600 )Pero son minucias si comparadas con la vibrante ejecución de arias que figuran entre lo más exigente del repertorio.

Yo suelo ser más exigente con los artistas más allegados a mi, porque hago un esfuerzo enorme por ser objetivo y dejar de lado los afectos y en este caso hay precisamente esa situación .Con Siri hemos sido muy amigos en sus años mozos en Montevideo. Es de las pocas cantantes que ha visitado mi casa mas de 3 veces. Y con Lujan tengo una deuda de gratitud que no olvidaré nunca por un gesto de grandeza que tuvo para conmigo cuando estuve en una situación de necesidad.

Peo no voy a colocarme en la posición de analizar pequeños detalles, porque el conjunto de la ejecución fue excepcional.

Voy a decir sí que Siri no tuvo una buena idea al escoger su primer aria (ATTILA ) que pide una vocalidad que no está dentro de su usual fach. Y menos aún para elegir su primer atuendo que pareció haber sido diseñado por un enemigo personal. No así el segundo que era bellísimo.

El recital terminó con un momento de gran emoción cuando Siri convidó a la platea a cantar cumpleaños feliz para su padre que cumplía años precisamente ese día. Siri siente una gran emoción siempre que habla de su padre y siente una enorme alegría de poder mostrarle lo lejos que ha llegado su hija y los aplausos que el público le dispensa.